EL PUENTE: ¡Shaná Tová!

Queridos lectores,

Me gustaría aprovechar el newsletter El Puente de la Embajada esta vez para desearos a todos Shaná Tová, un Feliz Año Nuevo, Rosh Hashaná 5775.

Estamos llegando al final de un verano lleno de violencia. En nuestra región la violencia fue provocada por una organización terrorista extremista que no sólo llama a la destrucción del Estado de Israel, sino que también actúa para lograrlo y, con este objetivo, utiliza los recursos y también a la población de Gaza. Esta circunstancia fue aprovechada por determinados grupos en España para incrementar el odio hacia Israel.

Parte de los medios de comunicación y de los periodistas situados en la zona ayudaron, mediante su retórica y los contenidos que eligieron emitir, pero sobre todo con lo que eligieron no contar al público español, a un proceso de demonización de Israel sin base alguna.

Sin embargo, también la voz de muchos españoles con conocimiento y conciencia, entre los periodistas, editores, articulistas, analistas…, se oyó más clara y fuertemente que en el pasado, lo cual permitió vislumbrar un poco, aunque no lo suficiente, la realidad que contrasta con la propaganda disfrazada de periodismo. Esta cobertura mediática siguió automáticamente las instrucciones de los portavoces de Hamás en Gaza en relación a todo aquello que no se puede explicar o emitir de Gaza: terroristas armados disfrazados de “civiles”, almacenes de misiles en mezquitas, escuelas y casas particulares, lanzamiento de misiles desde mezquitas, hospitales y escuelas, uso de escudos humanos y lo no menos importante, el rechazo de Hamás, en once ocasiones, del ofrecimiento del cese el fuego, mientras que Israel los aceptó todos y cada uno de ellos.

Finalizando este difícil verano deseo un buen año nuevo, tranquilo y fructífero, especialmente a los habitantes del sur de Israel y a los habitantes de Gaza.

Quiero desear también un año con éxitos personales y profesionales a todas aquellas personas que activamente nos han apoyado y ayudado a lo largo del verano en el esfuerzo de presentar una imagen más equilibrada y justa, para mantener lazos de amistad y de cooperación entre España e Israel. Gracias a vosotros de todo corazón.

Quiero desear también un feliz año lleno de logros a aquellos entre nuestros lectores que quizá no han sido activos y que tal vez tienen alguna crítica o reserva respecto a la política de Israel. Espero que durante este año que ahora empieza encontremos temas de interés común para ampliar vuestro conocimiento y contacto con Israel. Muchos temas de cooperación entre Israel y España pueden contribuir y beneficiar a los ciudadanos de nuestros dos países.

Del mismo modo, quiero desear un feliz año nuevo a aquellos que critican a Israel, a aquellos que eligieron manifestar de diversas formas su crítica, a veces agresiva, utilizando expresiones que nada tienen qué ver con la realidad de nuestra región. Les deseo un año de autoevaluación y de búsqueda más rigurosa y diversificada de sus fuentes de información (quizá existan otras fuentes más fiables que las de los seguidores de Hamás). La crítica es bienvenida si viene con equidad y respeto hacia un país que trata de proteger a sus ciudadanos, de luchar contra el terror yihadista y de mantener los valores de la libertad de expresión y de la democracia en condiciones muy difíciles.

Quiero por último desearle un feliz año nuevo a ese núcleo duro (y reducido) de los grupos y las personas más hostiles hacia Israel. Aquellos que tenían y todavía tienen la esperanza de utilizar a los ciudadanos de Gaza, verdaderas víctimas de las políticas asesinas de Hamás, para promover su agenda de siempre, agenda de odio y de demonización de Israel en España. También para ellos, un buen año, de esperanza y búsqueda de una agenda más positiva, que pueda realmente contribuir al bienestar de los palestinos, de los israelíes y de todos los pueblos de la región, y que nos ayude a cumplir el sueño de una vida en común en Oriente Medio. Una agenda alejada de las buenas intenciones de los que siempre siembran más y más violencia y miseria en nuestra región esperando que eso refuerce su imagen y si estatus entre el público español.

A todos nuestros lectores, sea cual sea su postura, quiero desearos un feliz año nuevo, que sea de florecimiento, de colaboración, cooperación y continuación del diálogo constructivo entre España e Israel.

¡Shaná Tová – Feliz Año!

Alon Bar

Embajador de Israel